A pesar de su compromiso, la planta ha pasado casi un año lesionado en las últimas temporadas.
Dudar de la profesionalidad y el compromiso dentro de un terreno de juego de Carles Puyol es algo que muy pocos osados pueden hacer. El capitán del Barcelona ha sido siempre un ejemplo para muchos, tanto en su equipo como en la selección española.
Carles Puyol ha sido desde hace años el jefe de la defensa blaugrana y española, un indiscutible por su garra y sus cualidades. Sin embargo, la edad no perdona a nadie y el catalán empieza a sufrir las consecuencias. Problemas musculares, lesiones de rodilla, roturas de pómulo...
Carles Puyol se escapa ahora del tópico del defensa irrompible. En las dos últimas temporadas se ha convertido, tal vez, en el zaguero con más problemas físicos del fútbol europeo. Desde el verano de 2010, la sucesión de inconvenientes le ha provocado un periodo de baja de poco menos de 300 días, barrera que superará tras la última lesión sufrida en Getafe, que le mantedrá mínimo un mes alejado de los terrenos de juego.
El buen momento de forma de Gerard Piqué y Javier Mascherano parecen haberle relegado, como es normal a su edad, a la suplencia. Sin embargo, el eterno capitán siempre ha dado la cara por su equipo, y ha sido esencial en muchos partidos, no tanto por su juego como por su carisma y espíritu en el campo.
Y aunque pasen los años y hacer una abolladura lesiones, Puyol es y será un símbolo para este equipo y que sabe Guardiola, Vilanova, Barcelona y el fútbol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.